El hotel no está mal, pero claramente es un lugar antiguo que requiere una renovación. Los pasillos son oscuros, con luces automáticas que no siempre encienden. La habitación, sin tener defecto alguno, se ve que es antigua, en especial el baño. Pareciera que uno retrocediera a los años 70. Tiene una pequeña pantalla que hace de tv, que no estoy seguro si es TV en realidad, sino una pantalla de ordenador. Eso puede mejorarse fácilmente.
Creo que el hotel ganaría muchísimo con una renovación, con pacillos más luminosos, habitaciones con aires modernos, incluyendo los tecnológicos. El personal de día maneja bien otros idiomas, más el de noche no, por lo que si uno se levanta muy temprano, o llega muy tarde, tendrá problemas de comunicación. Esto también debe mejorar. No me gustó que me pidieran quedarse con mi pasaporte al llegar para anotar mi información e ir buscarlo más tarde. El desayuno comienza relativamente tarde, por lo que en mi caso que bajé a las 6 de la mañana, no estaba disponible.